YO TAMBIÉN KIERO SER FINLANDIA. PERO SÉ KE ES IMPOSIBLE

Cuántas verdades en un programa. Al verlo, me gusta fijarme también en las imágenes secundarias, las de los niños jugando en la nieve, caminando con dificultad con esos monos de abrigo y esas botonas gordas contra la intemperie de, supongo, varios grados bajo cero... Son tan distintos. Todo es tan distinto. Los padres no gritan, no se quejan de todo, no esperan que alguien venga a solucionarles la papeleta, y sus hijos tampoco. No sobreprotegen de peligros imaginarios a sus vástagos, solamente son realistas. ¿Están solos en casa? Pregunta Jordi. Sí, tienen móvil, responde la profesora de Finlandia. Así de sencillo.... Los políticos no se han metido allí, por lo menos no desde los años 90, a legislar la educación para moldear la sociedad a su imagen y semejanza. No han jugado con algo tan serio como el futuro de nuestros hijos. No han favorecido intereses económicos para cargar las espaldas de nuestros alumnos con libros preciosos y de colorines, pesados y caros, que a veces no se sabe ni lo que cuentan dentro. Los profesores lo son porque quieren serlo, no porque sea un trabajo para toda la vida que garantice un puesto fijo, sin tener en cuenta si se tiene o no vocación, sin que les quede más remedio, porque es una salida más sencilla y menos exigente que un trabajo privado, que estudiar otra carrera más dura, que prepararse a lo largo de la vida, como aquí, Y su preparación es tan buena, que nadie la cuestiona, posiblemente porque los propios padres también están bien preparados y son gente "educada". En este bendito país de espabilados que sin educarse llegan lejos y son admirados socialmente, de gestores de recursos cortoplacistas que malgastan antes de tener, de historia convulsa, herencias dictatoriales, legados heredados de linajes poderosos y políticos de medio pelo que carecen de un mínimo de preparación para afrontar problemas y tomar decisiones y, finalmente, donde el "bien común" ha dejado de enseñarse en una asignatura"maría" llamada Educación para la Ciudadanía que al parecer era venenosa para hacer ciudadanos; en este país, digo, es imposible ser Finlandia. Sencillamente: Imposible...
A mi tambpoco me gusta el frío. Los países cálidos le damos más a la juerga y al cachondeo.
Un poco de equilibrio no vendría mal. Pero supongo que Spain is diferent y la educación no tiene mucho sitio en el planteamiento de este estado de servicios tipo "eurovegas", de diversión y de ocio que somos,
No tengo la solución, pero lo que veo no me gusta. En la calle y en la educación. Somos tan, tan maleducados que no me gusta nada. Claro, trabajo educando...Es lo que tiene.
Ellos también ven "Aquí no hay quien viva", pero la diferencia es que allí no se educan con ello, solo es ocio, y controlado, por cierto, no se educan con la tele, la play y los ordenadores, como aquí.
Qué más da que el niño esté solo. Sabe lo que tiene que hacer. Aquí no tienen ni repajolera idea. Siempre les dicen lo que tienen que hacer, y a menudo, simplemente, no les dicen nada de nada...
Un poquito de por favor, como dice el Fiti que también ven ellos...
http://www.lasexta.com/programas/salvados/avances/salvados-vuelve-lasexta-cuestion-educacion_2013013100179.html